7 nov 2019

Padre



Padre

Autor: Fray Alejandro R. Ferreirós OFMConv


Sumergido en tu abismo, Padre Santo,
postrado ante tu Amor, tu nombre invoco,
es tierno tu poder y poco a poco
descubro la dulzura de tu encanto.

Tu voz es poderosa y me subyuga
tu aliento es vendaval y brisa suave
materna tu presencia si me invade
la mano paternal con que me ayuda.

Tu rostro es insondable en su misterio
más allá de la luz, del sol, del día,
más allá de la euforia y la alegría
tu fuerza en que se quiebra el cautiverio.

tu abrazo es el Amor que acuna el alma
la mano que acaricia mi desierto
es la lluvia que riega el valle muerto
el trueno que se entrega en noche calma.

Tu aliento es el solaz de tu cuidado,
el perfume del mar que besa el cielo
es unción de la vida y su consuelo
suavidad de tu Espíritu entregado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario