Himno: CUANDO VUELTO HACIA TI DE MI PECADO. Cuando vuelto hacia ti de mi pecado iba pensando en confesar sincero el dolor desgarrado y verdadero del delito de haberte abandonado; cuando pobre volvime a ti humillado, me ofrecí como inmundo pordiosero; cuando, temiendo tu mirar severo, bajé los ojos, me sentí abrazado. Sentí mis labios por tu amor sellados y ahogarse entre tus lágrimas divinas la triste confesión de mis pecados. Llenóse el alma en luces matutinas, y, viendo ya mis males perdonados, quise para mi frente tus espinas. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario